El proyecto «El color de las emociones» del Colegio Zola Valdemorillo
Con la campaña de Redes Sociales #GraciasPorProtegernos
En el Colegio Zola de Valdemorillo estamos desarrollando un proyecto muy interesante junto con nuestros alumnos y alumnas de Secundaria.
Dentro de nuestro programa educativo Pensamiento emocional trabajamos las emociones a partir de una reflexión sobre los incendios forestales que este verano han devastado gran parte de España. La idea central es aprender a identificar, expresar y transformar las emociones en acciones positivas.
De este modo, los estudiantes analizan qué emociones les despiertan estas situaciones, miedo, tristeza, indignación, orgullo, admiración, utilizando una de las piezas esenciales de este proyecto: el Emocionómetro, un mapa de colores diseñado para ayudar a los alumnos a poner nombre y matices a lo que sienten.
Gracias a esta herramienta, pueden reconocer si lo que experimentan ante las noticias de los incendios es tristeza (azul), ira (rojo), miedo (violeta) o incluso orgullo y alegría (magenta), al ver cómo bomberos y voluntarios luchaban contra las llamas. Esto les permite comprender que todas las emociones son válidas y necesarias, y que al reconocerlas es posible transformarlas en acciones constructivas, como esta campaña.
Como parte del proyecto, los alumnos están desarrollando tres iniciativas concretas:
- Una reflexión escrita sobre el impacto de los incendios, sus causas y soluciones.
- La redacción de una carta de agradecimiento que se ha enviado ya a las sedes de los agentes forestales y bomberos, reconociendo su esfuerzo y sacrificio.
- El diseño de una campaña en redes sociales con el hashtag #GraciasPorProtegernos, para visibilizar y agradecer públicamente su labor.
Bajo este hashtag, nuestros alumnos y alumnas han elaborado mensajes breves y emotivos, en formato texto, imagen o vídeo, con un objetivo claro: dar visibilidad a la entrega de los bomberos y sensibilizar a la sociedad sobre su papel esencial en la protección del medio ambiente y de las comunidades.
Este proyecto demuestra cómo la educación emocional puede convertirse en una herramienta poderosa para que los jóvenes comprendan la realidad que les rodea y, al mismo tiempo, se comprometan activamente con la sociedad. Desde el Colegio Zola de Valdemorillo seguiremos impulsando iniciativas que unan aprendizaje, emoción y acción, porque estamos convencidos de que así se forman ciudadanos más empáticos, responsables y solidarios.